Para no fumadores, o para quien pueda dejar el cigarrillo aparcado durante la jornada playera. La Plage Lumiere (Paya Luminosa) de la Provenza ya no brillará por las puntas de cigarrillos sino por su sol, sus aguas y su arena. Es la primera playa francesa en la que se prohibe fumar.
Una pequeña población de la Provenza ha logrado atraer más turistas al transformar una sección de su playa en la primera del país galo en la que no estará permitido fumar.
Y es que, al contrario de lo que pudiera pensarse, la prohibición de fumar, que entró en efecto a finales de junio, ha surtido buen efecto e incluso ha atraído más turistas. Fue el vicealcalde para la protección del medio ambiente de la localidad el que tuvo tal idea, muy bien acogida por los playeros.
Todo aquel que llega a la Plage Lumiere entra por un arco que les advierte sobre la prohibición de fumar, y dos ceniceros sujetos a los postes de entrada facilitan la recogida de colillas antes de que los usuarios puedan pisar la arena.
El vicealcalde ha declarado que
No impedimos que los fumadores acudan a otros lugares, pero esta sección queremos reservarla para los no fumadores, para la madres y los niños, para que puedan hacer castillos de arena y no castillos de colillas.
No se trata de la primera playa en el mundo que prohíbe fumar (la fotografía corresponde a una playa de Busan, en Corea del Sur), en España se intentó hacer pero la ley antitabaco aún no llega a este extremo.
La población de La Ciotat, donde se sitúa esta playa libre de humos, se triplica en el estío, por ser un destino turístico habitual para los marselleses, entre otros. Seguro que a la larga, fumadores y no fumadores agradecerán que la arena de la primera playa francesa en la que se prohíbe fumar esté libre de colillas.